martes

Conclusion

Hay personas que consideran que vivir y hacer las cosas de manera acelerada es muy bueno, sin embargo, esto puede tener consecuencias no tan buenas ya que se puede perder el placer en lo que se hace y el hecho de disfrutar algo como se debería disfrutar.
Cabe destacar que en algunos casos puede encontrarse el lado positivo, ya sea en momentos negativos que nos tocan vivir o en circunstancias en las que queremos que todo pase lo más rápido posible, para evitar los malos ratos. Yo creo que el conocimiento y el aprendizaje juegan un papel muy importante en la vida de una persona y, en este caso, lo rápido por aprender algo se pone en juego. Al aprender uno crece y adquiere conocimientos básicos para la vida, y si de esto se trata, es necesario tomarse el tiempo necesario para que el resultado final sea el esperado, y no subir cinco escalones a la vez para que en un futuro no entendamos nada por haber aprendido tan apurados. El tiempo para aprender debe ser el justo y necesario para que podamos aprovechar el aprendizaje. Por eso es necesario reflexionar sobre el valor que cada uno le da al tiempo, cómo lo utiliza y qué importancia tiene en su vida, ya que el hecho de tener algo o intentar ser “alguien” mas rápido, no significa que nos sirva en un futuro. Muchos creen que apurarse por aprender, tiene la posibilidad de obtener mas privilegios o beneficios, pero a la hora de poner en practica esos conocimientos, muchas veces la respuesta no es la esperada.
En conclusión, yo creo que vivir aprovechando el tiempo, disfrutando de lo que se hace, sabiendo cuando y cómo acelerar o desacelerar, es la mejor receta para aprender bien, aprovechar los conocimientos adquiridos, avanzar y encontrarle un verdadero sentido a la vida.

1 comentario:

Diego dijo...

Muy buen el texto Reni!!!! Sería bueno pensar esto para encontar "sentidos" a muchas cosas.